Hace un tiempo que os vengo comentando que debo parar el ritmo... y así lo noto cada vez con mayor rotundidad.
Tras una pequeña intervención quirúrgica a principios de semana, en casa se alojó un virus gripal intestinal que nos ha ido dejando con pocas fuerzas y muchos dolores y tiritonas, así que no he tenido ni ganas de acercarme al ordenador...
Y ahora, que comienzo a estar ya más fuerte, me doy cuenta de que el ritmo nuevamente quiere atraparme y antes de que lo haga y tenga que dejarme KO con un mayor y elevado tono de voz (como suele hacer...), he decidido seguir introduciendo pequeños cambios en mis rutinas.
En estos ratos "muertos" me he dado cuenta de que la paciencia es un valioso tesoro (del que suelo manejar sólo "calderilla" y voy a tratar de probar a llevar "billetes más grandes"), y también que "quien mucho abarca, poco aprieta"... y éste también suele ser mi sello...
Estoy en una época en la que me estoy preparando tareas relacionados con mis cursos, tanto semanales como de iniciaciones... también necesito tiempo para dedicarme a pintar y dibujar, mi meditación más auténtica... y al tiempo, y lo más importante, preparándome para vivir. Sí, vivir.
Que a eso nunca se acaba de aprender del todo. Vivir con mayor conciencia dentro de todo el espacio y las personas con quienes he decidido hacerlo... Y claro, conmigo... ;)
Además de que también tengo un asuntillo pendiente con la Madre Naturaleza, para ir a hacerle un guiño cada mañana o atardecer...
Por todo ello, os comento que estoy encantada de seguir compartiendo este espacio con personas tan maravillosas como quienes os acercáis a él, pero que, esta vez sí, voy a ralentizar mi comunicación directa con vosotr@s... pues es cierto que no se puede hacer todo lo que un@ desea (tenías razón, querida Graciela ;)...) y aunque me encanta conversar con cada un@ de vosotr@s, no puedo hacerlo sin detrimento de otros apartados, también importantes (o igual de relativos, en este mundo de ensueño...).
Voy a seguiros visitando cada vez que pueda, y os voy a llevar siempre de forma muy personal en mí, aunque no siempre comente... pues sois 151 estupendos blogs los que estáis en mi lista de espacios entrañables y de los que aprendo y bebo a menudo, llenos de preciosas obras de arte, de humanidad, o de secretos para amar más la vida... pero a quienes no puedo dedicar ya todo el tiempo que desearía... entre otras cosas, porque tampoco ya deseo obligarme a costumbres de buena vecindad, y estoy segura de que me comprendéis.
Tengo la intención de compartir, como hoy, las acuarelas o los dibujos que hayan ido surgiendo, las anécdotas con las que vibro, como el hecho de que hoy uno de mis retoños cumple sus 19 años y junto con su hermana, tanto me enseñan también...
Haceros partícipes de la música que me hace soñar o vivir aquí ahora... así como videos, escritos de tantos sabios que por el mundo hay, o presentaciones que estoy convirtiendo para poderlas compartir también con tod@s quienes queráis venir...
Veré también cómo gestionar mi participación en el espacio http://ladronesdecuadernos.blogspot.com/ para poderla llevar a cabo, y quizás de esta manera, también pueda publicar en el Facebook, donde no puedo ni entrar... pero tan sólo limitándome a publicar.
Después de haberos explicado todo este rollo, acabaré con él diciéndoos que no os puedo asegurar que os conteste de forma personal ni que comente en vuestros espacios, pero siempre tendréis la puerta abierta del Espíritu de Avalon diciéndoos: "Siéntete libre de comentar lo que desees"... pues como sabéis nunca ha habido moderación en vuestros comentarios y estos siempre han estado llenos de una calidez y sabiduría difícilmente superables...
Os invito, pues, a que sigáis haciéndolo, pues os lo seguiré agradeciendo como el primer día.
Es un momento en el que deseo mantener la cierta serenidad que muestran las aguas del mar de esta acuarela y al tiempo dedicarme al sol, a su fuente inagotable de energía, como se vuelve el girasol de la primera...
Y ahora, os dejo con unos dibujos que realicé en un cuaderno hace poco, en Tossa de Mar (y que ya algunos habréis visto en blog de ladrones...), y con un precioso video de Julio Andrés Pagano.
Un fortísimo y entrañable abrazo, y sigo aquí en corazón!